Del Minuto 1:21 al 4:16 el Jornal Hoje de Brasil reporta la muerte de Carlos Alberto, un anciano, en Río de Janeiro, quien necesitaba una cirugía, para cambiar una prótesis de fémur, que nunca llegó por más de 9 años. Él era paciente de uno de los principales hospitales públicos de Brasil, el Instituto Nacional de Traumotología y Ortopedia, INTO. Se encontraba en el número 40 de 12,500 personas. La prótesis antigua que tenía se infectó y como ese instituto no tenía servicio de urgencias, el 1 de mayo fue internado en otro hospital.
Desde agosto del 2018, los pacientes que precisan de prótesis no son operados en el Instituto Nacional de Traumotología y Ortopedia, INTO, según maniestan atraviesan dificultades para encontrar proveedores por causa de denuncias de la operación Lava Jato envuelto en la compra de materiales para cirugías. En julio del 2018 entre los ex directores que fueron apresados, se encontraba el que estaba a cargo del INTO. El hospital quedó ocho meses sin director. Recién en marzo del 2019 que tiene nuevo director.
A partir del 15 de mayo, iniciaron las licitaciones para compras de prótesis.