El secretario de Estado de Estados Unidos de Norteamérica, Antony J. Blinken, manifestó que en la administración Biden-Harris, el empoderamiento y la protección de mujeres y niñas, incluida la promoción de su salud sexual y reproductiva y sus derechos reproductivos, es una parte central de la política exterior y la seguridad nacional de los Estados Unidos. La acción de hoy del presidente Biden ayudará a mejorar las vidas de mujeres y niños en todo el mundo al expandir la base de socios que implementan la asistencia médica de los EE.UU. Y aumentar el acceso a servicios de salud críticos, incluida la atención de VIH / SIDA para poblaciones clave, información y servicios de planificación familiar. y diagnóstico y tratamiento eficaces de la tuberculosis.

Informó que el Departamento de Estado también está tomando las medidas necesarias para que los $ 32,5 millones asignados por el Congreso estén disponibles en 2021 para apoyar al Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA): »El trabajo del UNFPA es esencial para la salud y el bienestar de las mujeres en todo el mundo y apoya directamente la seguridad y la prosperidad de las comunidades de todo el mundo, especialmente en el contexto de la pandemia mundial de COVID-19».

Blinken, afirmó que Estados Unidos, como el mayor donante de programas de salud materna y planificación familiar voluntaria, incluida la prestación de servicios de atención médica que salvan vidas en situaciones de crisis, continuará sus esfuerzos para hacer que el embarazo y el parto sean más seguros mediante el fortalecimiento de los sistemas de salud para brindar a las mujeres servicios integrales. servicios de salud, incluido un mayor acceso a la atención de la salud materna y la planificación familiar voluntaria.

Asímismo, dijo que se asociarán con gobiernos, el sector privado y organizaciones internacionales y no gubernamentales para mejorar los resultados de salud y empoderar a las mujeres y niñas para que puedan desarrollar todo su potencial y ayudar a impulsar el desarrollo social y económico.

En ese sentido, Estados Unidos retirará el copatrocinio y la firma de la Declaración de Consenso de Ginebra de manera oportuna y apropiada según el secretario de Estado de Estados Unidos. »Bajo el liderazgo del presidente Biden, Estados Unidos está volviendo a comprometerse multilateralmente para proteger y promover los derechos humanos de todas las mujeres y niñas, en consonancia con el consenso mundial de larga data sobre la igualdad de género y la salud sexual y reproductiva y los derechos reproductivos».

Debido a las declaraciones del presidente de Estados Unidos de Norteamérica, Joe Biden, sobre el fallo Roe vs. Wade según Plan Parenthood – y que posteriormente Norma McCorvey con el seudónimo de Jane Roe se retractó– que legalizó el aborto en 1973 en todo EE.UU. (presentado en la corte de Texas según las leyes dictaban en Texas que el aborto era inconstitucional, excepto en casos en los que la vida de la madre estaba en peligro), los obispos católicos exhortan a la administración Biden-Harris a rechazar el aborto, al tiempo que señalan como »eufemismo de servicio de salud» a la práctica del aborto que un presidente- en este caso- Biden se comprometa a cumplir un fallo de la Corte Suprema (amparándose en el fallo Roe vs. Wade) que niega a los niños no nacidos su más básico derecho civil, el derecho a la vida, Del minuto 0:49 al 2:35: